Sigo con mi propósito de soltar en Cada Luna Negra (justo el momento más menguante antes de la Luna Nueva) las partes de mí que ya no me identifican, las partes de mí que no me permiten mostrar la autenticidad que siempre he llevado adentro.
Y sigo invitándote a que me acompañes, a que te inspires y hagas tu suelta y despojo conmigo.
Este mes la Luna Nueva será en Escorpio, será el próximo lunes 28 de OCtubre.
Es posiblemente la Luna Nueva más intensa del año. Nos acompaña la energía del chamán, la que es capaz de bajar al fondo de la oscuridad y transformar lo que opaca en luz y brillo.
Hoy continuando con mi forma de soltar me animo a hacer el despojo de aquello que ya no me pertenece de la energía que está muriendo. De la energía de Libra.
En este mes de Libra se han puesto de manifiesto todas esas formas violentas y antiguas en las relaciones con un otro.
En Libra somos un Nosotros, ya no hay un Yo solamente.
Por eso en este mes podemos haber detectado qué tan elevado ha estado nuestro YO en nuestra vida.
Cuánta dominación, necesidad de tener el control o el poder sobre el otro hemos tenido.
Cuánto nos hemos diluído en el otro, le hemos necesitado para que nos lleve, nos sostenga, nos cuide.
Un YO integrado es esencial para entrar a un Nosotros abierto y efectivo.
Por eso este mes Libra han estado recibiendo mucha información acerca de las relaciones de pareja.
El propósito ha sido que la revisen, ha sido una invitación a mirar cómo se han constituído en ese Nosotros y cuáles son los automáticos y mecanismos que han de ser Soltados.
Les invito entonces a que preparemos juntos un Ritual de Suelta grande a toda la energía que constituye esa relación de Pareja, de socio o la relación con nosotros mismos que ha de soltarse hoy, entregarse al agua profunda de la transformación y elevarse a una forma útil para nuestro Ser que nos lleve al disfrute.
Para comenzar diría que hemos de reflexionar sobre las formas que hemos identificado en nuestro vínculos:
- La dominación, necesidad de llevar siempre la razón y el no poder ver las necesidades de un otro que está enfrente.
- El entregarnos al deseo del otro y diluírnos en ellos sintiendo que somos víctima de la vida, del otro, de la situación.
- La dependencia emocional del otro y toda el dolor que genera el NO PODER.
- La necesidad de mantenernos fuera de conflicto.
- El silencio para no manifestar nuestros verdaderos deseos y necesidades reprimiendo esa energía.
- Nuestro cierre tan profundo que nos impide vincularnos con el otro.
Etc.
Aprovechen estos días para esta reflexión. Para poner sobre papel aquello que han reconocido que ha de ser soltado de estas formas vinculares.
Como estamos además entrando en la Energía tan potente de Escorpio será un mes completo para la suelta.
Les animo a soltar entonces todo lo que han ido detectando en sus procesos de indagación personal, en sus miradas hacia adentro.
Soltar por ejemplo:
El dolor por ser rechazados o excluidos del clan.
La tristeza por no haber estado a la altura en determinadas situaciones.
El dolor por haber violentado a los otros (compañeros, amigos, hijos) desde otro nivel de consciencia.
El miedo a la no pertenencia.
El dolor de reconocer las veces que hemos permitido la violencia sobre nosotros desde nuestra profunda dependencia del otro.
El dolor de ejecutar, de permitir y de callar.
etc.
Luego de tener más o menos claro lo que hemos de Soltar les invito a hacer un Ritual de Agua.
El mío ha sido muy sencillo, casi al pasar como voy haciendo todos mis rituales.
Vengo días observando cuáles son las cosas que quiero soltar en todo este período de Escorpio, las he escrito, las he reflexionado a solas, las he conversado con mi marido, con mis amigas, hermanas brujas, con mi hija, conmigo misma, y me doy cuenta que todo gira alrededor de dos emociones:
Miedo
Tristeza
He convocado en rezo sagrado a mis ancestros a que me acompañen a limpiar todo el dolor del clan.
Los dolores, las tristezas, las traiciones, y todos los patrones de victimismo, autoritarismo, pérdidas, carencias que se han forjado desde el nacimiento de este linaje.
Les invito a que convoquen a las energías que les antecedieron y a que juntas suelten todo lo que han detectado o intuyan.
¿ La forma? para mi ha sido muy sencilla.
He ido caminando con mi hija hasta el arroyo.
Allí en el camino hemos encontrado una rama con muchas hojitas amarillas.
Asi que simplemente le he dicho
Vamos a soltar estas hojas amarillas y entregárselas al arroyo.
Suelto el miedo a:
y he ido listando mis miedos.
Ella ha hecho lo mismo (algunos me han sorprendido y otros me han emocionado)
Luego he dicho:
Suelto la tristeza de…
Y ella ha lanzado los suyos al agua
Al terminar las dos hemos dicho:
¡Ahó!
¡Ahó!
¡Ahó!
Al terminar, una ramita ha caído a nuestros pies y nos la hemos traído para el altar.
Y eso ha sido todo.
Para mi es suficiente.
Espero que para ustedes sea de inspiración y puedan ir haciendo la suelta.
Basta tomar consciencia de los patrones que ya no queremos que sean parte, y ponerles en un espacio material y ritual.
Otras sugerencias para un ritual de agua:
Preparar un baño de inmersión con los aceites y aromas que nos permitan la máxima relajación en contacto con el agua: sumergirnos en el agua y entregarle al agua todas las emociones, es especialmente útil para el victimismo y la tristeza, la culpa. Entregarlo, visualizar el agua recibiendo toda la emoción que hemos guardado en nuestro interior.
Al terminar recoger una porción del agua del baño y llevarla a la tierra.
Entregarle a la Madre Tierra el Dolor del Agua del Clan para que lo reconozca y nos ayude a transformarlo.
Foto: este es el altar que voy preparando poquito a poco para esta temporada Escorpio
Me acompañan El escorpión y la Serpiente guias de transformación.
El jaguar que simboliza mi lado poder ser autoridad sin ser autoritaria. El caracol y el lagarto son para no olvidarme que sigo pegada a la tierra y que aqui vivo.
La flor amarilla, la hoja de Roble y la pluma blanca son parte de Nectar, del Ritual de Otoño que me permití este domingo.
El fuego, el agua las piedras de tantos sitios que me acompañan, la montaña, los volcanes, los rios, el mar; las piedras corazón que encuentro o me obsequian.
Las plantas, la frondosa que ya es madura, la pequeña apenas despuntando. Y finalmente la rama de hojas amarillas que hoy nos han prestado su servicio para esta suelta.
