¿Dónde está ese centro calmo?
Donde todo lo que nos sucede es aceptado.
Donde cada instante cobra valor infinito.
Por vivido.
Por atravesado.
¿Cómo llegar a ese espacio?
Me preguntaba hace un año.
Un año entero revisando ese lugar de lucha/rendición para llegar finalmente hoy a la aceptación.
Ninguna realidad es lo suficientemente dura para quitarnos de este vida evadiéndonos en un mecanismo antiguo del personaje, que solo esconde detrás el amor profundo, las flores de este corazón abierto y disponible que siempre ha estado ahí, pero casi nunca hemos percibido.
Más duro es mantenernos en la muralla dura y oscura, en solitario donde la soberbia nos aleja de la propia tristeza.
Más duro es mantenernos en la guerra que nos distrae y canaliza toneladas de energía y esconde abajo el deseo profundo de Ser aceptados y amados.
Más duro es mantener la elevación a espacios mentales e intelectuales que entienden pero no sienten y que esconden la profunda desconexión con el corazón.
Más duro es mantenernos ahogados en la tristeza , la queja o el victimismo y debajo mantener ocultos los dones de la compasión y la vulnerabilidad.
Vulnerable ME ACEPTO.
Sin máscaras ya.
El corazón es fuerte.
Voy acompañada siempre de mi propia energía y de la otras tantas en el mismo camino.
Voy acompañada de mi amor infinito que durante años se ha resguardado detrás de todas esas máscaras.
Y que ahora sin ánimo de muralla, ni de guerra, ni de evasión intelectual, ni de victimismo, simplemente desea Ser y Amar.
Acepto
Con profundo respeto por todo lo que Es…
Acepto
Todo lo que me va sucediendo.
Todo lo que la vida trae.
Reconociendo que en la sola aceptación
Caen mis murallas, mis luchas, mi mente pequeña y mi queja.
Y el corazón florido
Sale,
Ama
Y Es.
Acepto.
Andrea Díaz Alderete
Consciencia Madre
Foto: mi carta de hoy de la Baraja del buen Viajero: Aceptación.
Y el sahúmo de lavanda, romero e incienso para limpiar cualquier herida del útero de esta mujer que soy y de todo mi linaje.
Útero abierto y disponible
Que no lucha
Que crea
Y ama
Ahí esta el poder.